viernes, 13 de julio de 2012

Todo ha muerto


Todo ha muerto, todo ha desaparecido desde que te marchaste. Murieron mis besos agrietados por el tiempo, en tus labios de deseo enloquecedor, esos que mojabas con tu lengua invitándome a jugar con ellos. Murieron mis caricias perdidas entre tu piel, entre los laberintos de tus curvas que deseaban ser recorridos entre la sensibilidad de tu bello erizado cuando mi aliento lo recorría. Murieron nuestros abrazos, desvanecidos en el adiós eterno de la despedida, entre lágrimas que resbalaban por nuestras mejillas para acabar empapando nuestra boca del néctar salado. Murieron tus latidos que llenaban el silencio de la soledad de mi alma, la que aun te acompaña y en sus sueños te encuentra, porque es ella la que sueña contigo, la que hace que en cada despertar le haga el amor a tu recuerdo, a pesar de que cuando te desvanezcas de mi mente no habrá más.
Mueren las palabras, silenciadas por la guerra, la de tu corazón, que permaneció en eterna lucha, entre dos mundos el del pasado, que tanto daño hizo, y el del futuro, que tanto me hiere. Mueren los te quiero dichos entre sueños, mientras te refugiabas en el calor de mi cuerpo, ahora el suyo. Murieron tus risas, asesinadas por errores, que se confundieron con verdades.
Muere mi corazón , mientras al tuyo le dio vida, muere por ti, porque mientras muere es feliz, pues te mantiene en el. Muere el recuerdo de los días felices en tu compañía con las manos entrelazadas fuertemente. Mueren los finales felices, pues el amor muere cada vez que un instante roza mi tiempo para recordarme tu vació.
Todo a muerto, todo ha desaparecido desde que te marchaste, porque tu te has llevado mi vida.

1 comentario:

  1. Me gusta tío, pero recuerda una cosa: cuando algo termina, siempre es el comienzo de algo diferente, y quien sabe si en ese algo, encuentras lo que buscabas antiguamente.
    Y bueno no digo más que hoy estoy ya demasiado sensible, más de lo habitual.
    Te veo luego loco. Te quiero mazo.

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