Un día como hoy veras a
alguien sonreír y querrás devolverle la mirada, la sonrisa y aquel
gesto cómplice que aunque simple, apreciaras. Porque todo lo bello
es simple y todo lo simple es complicado a su vez. Porque las cosas
simples son las que mueven todo aquello que de verdad importa.
Simple y complicado es el
beso, ese beso de quien amas, ese beso que cuando se da tiemblas,
tiembla el corazón y se estremece tu cuerpo al sentir ese roce de
sus labios. Al sentir su lengua llenar todos los vacíos y los
recovecos de tu boca. Sientes que algo dentro arde, inexplicable pero
sencillo, porque la amas, porque la quieres, porque cada vez que la
besas demuestras lo que sientes, algo simple pero complicado.
Simple es la caricia, un
leve gesto de la mano, un movimiento suave y efímero, furtivo pero
cautivo de tu piel, porque es ella la que ansia que la acaricien otra
vez, que la roben sentimientos, la que se quiere erizar cuando sus
manos la recorran, porque con una caricia viste un sentimiento,
simple pero complicado.
Simples sin las palabras
pero complicado su significado, porque aveces se dice más de lo que
se quiere o simplemente se calla mas de lo que se debe. Simple es el
silencio de las palabras que llenan tus vacíos, y los suyos,
Esperando que uno de los dos pronuncie unas palabras sencillas o
complicadas, para llenar de música lo simple o complicado.
Simple es lo que sentía,
complicado lo que tu sentías, te amaba y me amabas, simple para mi
complicado para ti. En cada sonrisa, en cada beso, en cada caricia,
en cada silencio, se encontraba lo simple, el amor. Complicado es
ahora, pues tu simpleza tiene dueño y yo no domino a mi corazón,
que añora en cada amanecer tus ojos al despertar.
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