Disculpa, no me había
fijado en tus ojos. Lo siento pero no me había dado cuenta de que
quiero que me miren siempre, de que se despierten junto a mi, que en
una mirada me atraparon y me engañaron, me observaron y bajo su
mirada me sentí empequeñecer por la profundidad de tu brillo. Lo
siento pero no me gustaría olvidarlos y que no fueran mas que un
recuerdo en un día común.
Quisiera pedirte perdón,
por besar tus labios, ellos me llamaban, tu boca pronuncio un
adelante y su humedad me invito a continuar. Disculpa por no avisarte
de que no dejaría de morderlos, acariciarlos, besarlos. Disculpa si
aveces en la torpeza del ansia de tu sabor, mi boca deja su señal.
Disculpa porque ella solo quiere conocer el matiz de tu piel.
Disculpa por el tacto
frió de mis manos, pero mi calor ahora esta en el corazón. Por las
caricias que se tropiezan en los lugares mas suaves, que recorren una
y otra vez los desiertos de tu piel. Siento que mis manos no sean tan
ágiles como mis besos, siento que no te susurren palabras de amor.
Pero no siento que hagan lo que hacen porque con ellas tus suspiros
parecen una canción.
No quisiera molestarte ni
entrar en tu vida como un huracán. Disculpa si te molesto cuando mas
ocupada estas pero no quisiera que mis manos dejasen de tocarte. Me
culpo por mentirte en que yo no siento nada, en que no hay ilusión.
Disculpa por mentirte, pero con ello te marcharías.
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